miércoles, 24 de junio de 2009

La eliminación de la línea 5 nos hará más esbeltos

Hace varios días nos enteramos que la compañía bolivariana Metro de Caracas replanteará (cancelará porque no hay reales) el proyecto de la línea 5 la cual comunicaría Las Mercedes con Zona Rental. Sin embargo, el (ex)presidente Claudio Farías explicó la cancelación del proyecto: la línea beneficiaría a la oligarquía.

"La línea 5 ha sufrido quizás un retraso. Pero las estamos replanteando, pues nos parece que es una línea que no tiene ningún sentido", comentó Farías. "Esa es una línea que beneficia a la oligarquía (...) Las Mercedes, hermano, la Principal de Las Mercedes va a tener dos estaciones en la propuesta cuando todo el mundo que va a Las Mercedes va (sic) en su carro a los restaurantes. ¿Se necesita que la Principal de Las Mercedes tenga dos estaciones? Ni siquiera, La Hoyada y Capitolio", acotó.

Farías no dijo la verdad: no se necesitan dos estaciones en Las Mercedes porque la compañía se preocupa por el físico de nuestros compatriotas bolivarianos. Un poco de ejercicio no le cae mal a nadie ¿no? ¡Si nosotros supiéramos todo lo que tuvo que caminar Bolívar en su época!



Pero si esa fuera la verdadera razón, Farías estaría en lo cierto ¿no creen?: no hay necesidad alguna de una estación de metro para Las Mercedes; es bien sabido que el tráfico por esa zona es bastante suave. Además, TODOS los empleados que trabajan en los centros comerciales, restaurantes y comercios tienen carro. (Ah pues, que el que trabaja limpiando baños en Tolón no necesita para nada el metro, ¡por favor!, él tiene carro). No se puede beneficiar a ningún sector específico, señores, ¡ahora Venezuela es de todos!

Por otra parte, quiero enviar mi felicitación al presidente de la compañía Metro de Caracas: Claudio Farías… Ah coño, verdad que a partir de las declaraciones que hizo, la oligarquía junto a la CIA, hicieron que lo botaran… pero no importa, pues durante su excelente gestión (en la cual lleva como 6 meses dañadas las escaleras de Plaza Venezuela) se trabajó en el Metrocable más caro del continente ¡Qué orgullo! Es más corto que el de nuestro vecino país Brasil (Río de Janeiro), tiene una estación menos, nos dobla el recorrido y tiene más capacidad ya que cuenta con el triple de cabinas… ¡Pero el nuestro es más caro! De verdad que qué bonito es ser venezolano, ¿no? ¡240 millones de dólares imperialistas mesmos! ¿Quién lo creería? Ya no puedo esperar la fecha de inauguración (que ha sido postergada cinco veces) para tomarme una foto en alguna cabina y enviárselo a todos mis amigos por Feisbuk y Maispeis… ¡Motores a máxima revolución!

1 comentario:

  1. Lamentablemente, este no es el único problema que presenta el metro de caracas. Yo que nací durante el período presidencial de Rafael Caldera, no llegué a vivir la estupenda época de pasear por Sabana Grande, Plaza Venezuela, Chacaito, entre otras partes de la ciudad, cuando las calles estaban vírgenes de buhoneros, mendigos, o cualquier cosa por el estilo, que interrumpiera el paso de los ciudadanos que se dirigían al metro de Caracas. Durante los últimos años, el actual presidente, Hugo Chavez,ha dado la orden de desalojo de los alrededores de las entradas de cualquier estación de metro, y aunque bien se ha cumplido, en gran porcentaje, disminuir a todos los vendedores ambulantes, se logró también, introducirlos todos dentro de los vagones del metro, ocasionando tremenda incomodidad por parte de los usuarios, y hasta náusea del malandraje cochino, que irrumpe con los cortos lapsos de tranquilidad que cualquier ser humano desea tener mientras llega a su lugar de trabajo. ¡Pero no!, ahora todos los usuarios del metro tenemos que aguantar el llorantín constante de cualquier cantidad de mujeres y hombres que han perdido la dignidad entera, y deciden como último recurso, pedirle cuatro lochas a los demás ciudadanos. Tal y como sostiene Nietzsche, en así habló zaratustra "yo no doy limosna, no soy lo suficientemente pobre para hacer eso", es la postura que deberíamos tomar todos y cada uno de nosotros contra estas lacras humanas, pero al parecer, creo que se ve como algo muy complicado de realizar, ya que la gente, continua alimentando la existencia de estas larvas, que a la postre, conduce al llamado de mantenerlos dentro del metro.
    ¿Será que es muy complicado, desquitarse el valor cristiano de ayudar al prójimo?, ¿Será que no se da cuenta, la maravillosa venezuela revolucionaria, del "progreso" que estamos nosotros mismos construyendo?

    ResponderEliminar