De vuelta al '92...

Mientras tomaba mi café de las 11 p.m. respectivo, pasando los canales - la inspiración nace del ocio, siempre que nos remitamos al ocio creador- detuve un momento el "pasar" y observé con poca gracia el programa tal (lo abandoné tan rápido que no me dio chance de descucbrir el título) en el canal X (tampoco me percaté del mismo). Hacía referencia a los hechos acontecidos el lejano 4 de febrero del '92... ¿Seguiremos ocupando nuestro preciado tiempo con programas que hacen referencia a algo que ya, de por sí, nos ha abandonado -no comprendo por qué, sin embargo, 'nosotros' continuamos dándoles actualidad? ¿Vamos a seguir otorgándole importancia a cosas que ya no deberían extenderse -dado que no son ya sino lo que fueron; a saber, un cuento más a relatar-? ¿Seguiremos creyendo que lo antiguo le otorga cierto sentido a nuestro presente, y éste, a su vez, al futuro? Bueno, basta con darse cuenta de la frase muerta que nos regala Globo-terror (aquí sí considero le es benemérito tal atributo) que reza "Recordar es vivir" : recordar no es vivir, es recordar que hemos vivido así. ¡Dejemos al Pasado donde está! ¡Sepultémoslo! ¡Basta de excusar nuestros actos en él! Sin pretender confiar el la idea marchita de "progreso", se camina hacia adelante, esto es: hacia el futuro, el mañana; matando, no sólo el pasado lejano, sino el mismo instante que acaba de acontecer y ya se sumerge en sus aguas pantanosas.

El pasado se ha deslizado en mí, como un sueño se desliza en mí cuando me encuentro en el estado de vigilia; por tanto, artículo abandonado...

Nota: no he querido decir con esto más que he abandonado lo instantáneo, lo que sólo ha sido para mí un momento en la reflexión, para entregarme a lo que libremente he elegido me ocupe; a saber, escribir algo distinto a lo sido en febrero del '92...